Prepárate para dar información acerca de la razón que te lleva a consultar con nosotros. Traer una vaga idea de lo que deseas lograr puede ayudarnos a obrar de forma eficiente y efectiva.
La psicoterapia es diferente a los tratamientos médicos o dentales, en los que te sientas pasivamente mientras los profesionales trabajan contigo y te comunican sus diagnósticos y tratamientos. En SoltarSaltar no te vamos a decir lo que tú debes hacer. Es una colaboración totalmente activa entre nosotros.
Ten en cuenta que te haremos preguntas como “¿Qué te trae aquí hoy?” o “¿Qué te hizo decidirte a venir hoy y no un mes o un año antes?” Esto nos ayudará a identificar tu problema, aunque tú no estés seguro de por qué lo tienes o de cómo manejarlo. Por ejemplo, podrías sentirse enojado o triste sin saber por qué o cómo dejar de sentirse así. Si el problema es demasiado doloroso para tratarlo, puedes estar tranquilo. No te vamos a obligar a decirlo hasta que tú lo decidas o hasta que nos conozcamos mejor y entonces te sientas más cómodo para poder empezar a hablar sobre ello. Por eso te pedimos que nos expreses abiertamente que no estás listo aún para hablar de algún tema en concreto en la sesión. No hay ningún problema al respecto. Es lógico y normal.
También necesitaremos indagar acerca de tus antecedentes personales o familiares, de problemas psicológicos como depresión, ansiedad o cuestiones similares. Vamos a explorar cómo el problema que nos traes afecta tu vida cotidiana. Para ello te haremos preguntas para conocer si has notado cambios en tus hábitos de sueño, apetito u otros tipos de comportamiento. Asimismo, querremos saber con qué tipo de apoyo social cuentas, te preguntaremos también acerca de tu familia, amigos y compañeros de trabajo.
Si estás tomando medicamentos, anota cuáles son y sus dosis exactas, para que podamos disponer de esa importante información.
Si vienes a consulta porque te lo ha recomendado otro profesional, como un médico o un abogado, las anotaciones referentes a por qué lo hicieron pueden sernos de utilidad. Los expedientes clínicos de pruebas psicológicas realizadas por tu antiguo psicoterapeuta también pueden ayudarnos a conocer más rápido tu historial clínico.
Como es importante que el proceso no se precipite, probablemente vamos a necesitar más de una sesión para dar cabida a todas esas cuestiones. En cuanto tengamos tu historia completa, juntos trabajaremos en la creación del tratamiento más adecuado para ti.
Recordar todo lo que ocurre durante una sesión de psicoterapia puede ser difícil. Por tanto, llevar un pequeño cuaderno para tomar notas cuando consideres oportuno puede ayudarte en el proceso, aunque no es obligatorio que lo hagas. Hacer algunas anotaciones durante la sesión te permitirá participar plenamente en el proceso.
Al finalizar tu primera consulta, es posible que te hagamos alguna sugerencia de acción inmediata hasta la siguiente sesión. Por ejemplo, si padeces de dolores crónicos, podrías necesitar fisioterapia, medicamentos y ayuda para controlar el insomnio, además de la psicoterapia.
Como el cambio de comportamiento es difícil, la práctica entre sesión y sesión es fundamental. Es fácil recaer en viejos patrones de pensamiento y conductas tóxicas por lo que puedes mantenerte alerta a esto entre sesiones. Te recomendamos estar más atento a tu reacción ante las cosas y las personas, recurrir a lo aprendido en las sesiones anteriores y aplicarlo en esas situaciones de la vida real. Contarnos lo que has aprendido entre sesiones es muy útil. También es provechoso anotar todo aquello relevante que has vivido y lo que se te ocurra que consideres importante señalar o preguntar en la próxima sesión. Tendremos en cuenta toda esta información para poder ayudarte mejor.
En la medida que vas ganando confianza, verás cómo te resulta más y más fácil contar aquellas cosas que no quisiste relatar al principio porque, como es lógico, no te sentías cómodo o preparado para hacerlo. Cuando lleves unas cuantas sesiones, notarás cómo tienes una perspectiva completamente distinta de tu problemática y una nueva y agradable sensación de bienestar y esperanza.